Siguiendo en nuestro empeño de desmentir el origen consumista de las festividades y haciendo eco de lo que la renombrada Wikipedia expone acerca del origen del Día del Padre en España, diremos que efectivamente Galerías Preciados y El corte Inglés impulsaron tan noble causa pero el origen no fue mérito suyo:
En 1948, Manuela Vicente Ferrero «Nely» tuvo la idea de celebrar en su escuela una jornada festiva para honrar a los padres de sus alumnas. Resultó que varios padres, algo celosones de que se festejara el día de la madre y no el del padre, pidieron que también a ellos se le homenajeara. Aquel primer Día del Padre incluyó misa, entrega de regalos hechos en la clase de costura por las niñas y un festival infantil con poesías, bailes y teatro. Puesto que el Día de la Madre se celebra en el mes de La Virgen se decidió elegir la fecha de la onomástica de San José, considerándole modelo de padre y cabeza de la familia cristiana, humilde y trabajadora.
Esta idea fue difundida por la maestra en «El Correo de Zamora» y en el “Magisterio Español”, publicaciones en la que colaboraba. Hasta 1951 la idea no tuvo trascendencia nacional. Fue durante una entrevista en el programa de Radio Nacional titulado «Última hora de actualidad» donde relató personalmente a los oyentes la historia de este “Día”. Aquí es donde el entonces director gerente de Galerías Preciados, José Fernández Rodríguez, en 1953 propagó la idea con una campaña en prensa y radio, uniéndose más tarde el empresario competidor, Ramón Areces, director gerente de El Corte Inglés, reforzando el duelo entre ambos.
Mi primer recuerdo de mi padre
No estoy muy segura de cuál es así que compartiré lo que significa para mí la palabra «padre». Es ese músico que con una cacerola por sombrero, una sartén de pandereta y un cazo por micrófono se convierte en el hombre orquesta para conseguir que el puré de verduras desaparezca del plato al más puro estilo Mary Poppins y su «con un poco de azúcar». Ese mago que convierte un jardín en una plantación de monedas que nadie más que tú encuentra, evidentemente tras guiarte él con el haz de luz de la linterna dónde se encontraban las monedas. Es el «príncipe Carlos» de mi hermana; no sé porqué le llamaba así pero sí que mi hermana desde el balcón le llamaba y aparecía él trotando sobre un caballo blanco invisible. Y, por supuesto, arregla todo mejor que MacGyver y es más fuerte que Superman. Todo esto y más es un padre, tío, abuelo, incluso tu hermano, porque todos son, en algún momento, esa persona que te protege, cuida, regaña y enseña.
¿Cuál es tu primer o más feliz momento con tu padre?